Mitos y beneficios al bajar de peso sobre el agua fría
En el sector de la nutrición y particularmente en todo aquello vinculado con la información que se encuentra relacionada con bajar de peso, es bastante común que distintos datos que no están del todo comprobados puedan ir siendo compartidos entre personas sin que necesariamente sean verdaderos.
En relación con lo anterior, hay que mencionar que existe un cierto mito o idea errónea respecto a que el agua fría engorda o es mala. Además, la anterior afirmación se hace con mayor regularidad cuando la persona recién ha terminado de comer, llegando incluso al punto de mencionar que puede ser uno de los factores de la aparición de enfermedades graves como el cáncer.
Por supuesto la anterior idea no es más que una mera especulación, en donde se afirma que en caso de tomar agua fría una vez se ha terminado de comer, lo que se consigue es que las grasas ingeridas se solidifiquen y por lo tanto la digestión se retrase. Además, con lo anterior también se tiende a pensar que el estómago o en el intestino van a reaccionar de mala manera.
Agua fría: Lo que dicen los médicos
Lo interesante del caso, es que los médicos como profesionales especialistas en este tipo de información, en la mayor parte de los casos recomiendan el consumo de agua fría, más que nada una vez que se ha terminado de hacer ejercicio, ya que con su ayuda se puede lograr regularizar la temperatura corporal.
Por otro lado, también hay que hacer énfasis, del mismo modo en que una vez que se ha terminado de adquirir los productos de Herbalife, que por sus características, el agua fría obliga al cuerpo a incrementar el gasto de energía para así poder calentarse y por lo tanto, la consecuencia de lo anterior es que exista una pérdida de esta agua consumida.
De todas maneras, hay que ser claros en que existen situaciones en las que no es conveniente que la persona use o consuma agua fría, como es el caso de la subida de la fiebre, porque tomar la decisión de sumergir el cuerpo en agua fría no es lo más pertinente en estos casos, ya que puede significar la aparición de escalofríos o que la temperatura suba como una acción defensiva del organismo.
El problema real con el consumo de agua
Un dato que puede sonar cliché pero que se lo menciona con regularidad, es que una persona está en la obligación de consumir en promedio 2 litros de agua todos los días. De este modo, en caso que no se mantenga una cierta rutina que permita cumplir con la anterior recomendación, es mucho más probable que el cuerpo sea más susceptible a problemas de salud.
En ese orden de ideas, la orina es un muy buen indicador de cómo está reaccionando el cuerpo ante el consumo de agua. En caso que sea oscura, significa que el consumo de agua es bajo, mientras que si es de color claro, implica que se está consumiendo una cantidad suficiente. Por supuesto hay que recordar que en la mañana recién usted se levanta es natural que sea más oscura.
Otro factor que se puede tener en mente es la sed. En cuanto el cuerpo le hace saber a usted que tiene sed, hay que consumir agua, sin importar si se encuentra fría o caliente.
Finalmente, lo que se debe mencionar es que el aspecto que en realidad sí influye sobre la salud y la búsqueda de bajar de peso, es la cantidad y calidad del agua. La sugerencia es que usted seleccione aquella que proviene de fuentes naturales, libre de saborizantes artificiales y sin endulzantes.
Los beneficios de consumir agua fría
Para que quede un poco más clara la información, hay que mencionar que la ventaja principal a la que el cuerpo accede con el consumo de cualquier clase de líquido es la hidratación. Ahora bien, en lo que se debe hacer énfasis en relación con beber agua fría, es que este es un proceso que está vinculado de una manera muy fuerte con beneficios para la temperatura corporal.
- Ayuda a bajar de peso – El cuerpo va a poder mantenerse a una temperatura estable gracias a la ingesta de agua fría. Con lo anterior la temperatura va a disminuir y el cuerpo va a ingresar en un estado en el que se consumen más calorías para poder estabilizar de nuevo la temperatura.
- Bajar la temperatura del cuerpo – En cuanto usted termine de hacer ejercicio, la temperatura corporal va a subir y por lo tanto consumir agua fría va a ser una muy buena idea para estabilizarla, del mismo modo en que se ha mencionado en párrafos anteriores.
- Una hidratación más rápida – De la misma manera en que ocurre al hacer ejercicio, el organismo va a necesitar de una hidratación rápida. De este modo, el agua fría se absorbe a una velocidad más alta por el torrente sanguíneo.
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